Ttipi ttapa, ttipi ttapa, KORRIKA!


Tres de la mañana.
Seis bajo cero.
La aldapa que da acceso al valle más pirenaico de Nafarroa nos espera.
Nueve como la diosa Mari manda, osea corriendo.
Y un gilipollas en bici.
KO
RRI
KA
Luces, música, zancadas, y furgonetas. 
Llevo guantes para ochomiles pero un padre de familia me recomienda un Diario de Navarra al pecho.
Como estoy fino no se aprecia lo forrado de ropa que voy.
Seis kilómetros parriba.
Pasma detrás de gente corriendo, como siempre.

Una iniciativa corriendo por el euskera desde 1980.
En 2022 se regresa a las ediciones de los años pares de aquel 1980 y 1982.
Hamaika eguneko.
Un lekuko que recorrerá 2500 kilómetros.
De Amurrio a Donosti.

Ritmo alegre.
Sonrisas.
Vaho.
Alguna que otra zancada ortopédica por la acumulación de kilómetros sobre asfalto.
La canción de este año de la Korrika mola, nada de trap, regeton, ni mierdas así.
Pop-rock con letra bonita.
"Neguko eguzkitan
erantzi azala;
beti ziur dago(e)nak
Zalantza arreba dezala.
Bizitza jendea da (e)ta jendea gara.
Sentitu, pentsatu...
Sentitu, pentsatu, hitzekin."
También hay lemas aderezados con humor
Pim, pam, pum, (...) 
In, in, in (...) 

Ritmo alegre, a 6min/km subiendo a Las Coronas, con segmentos de strava a 5:15.
Después sabremos que Erronkari en llano llevará el lekuko a 5:22.
Zaraitzu muy alegre, siempre han ido de kirolaris top, Aezkoa por momentos a 18:00.
Y Terete Turuku nos abandonará por correr al sol.
Ojo, algún energúmeno la llamará traidora por chat y dará vítores hacia alguna competidora del Konkis.
Inge arranca con el testigo, zancada corta y muy viva.
Lur corre y habla por el micrófono a la vez.
Latasa hace footing para soltar piernas a 5/km y no se da cuenta que hay peña que se queda.
Los herman@s Huarte muy serios y profesionales; Iosu, Nere y el del periódico en el pecho; chapeau!
A Hugo le veo beber vino, en serio.
Oier se sube a una furgo a saludar.
Y Kepa aun no se cree que estos kilómetros que no se habían comprado por ser en subida y a las 3 de la mañana en el confín de Nafarroa, sean semejante regalo.
Tocará entonces llevarse carteles-souvenir kilométricos.

En la cima de Las Coronas toca regresar a Nabaskoze a por la furgo.
Hace frío y hay que regresar a por los cachorros para que no se enfríen. 
No veo ni ostias, poca luz a dos ruedas, tengo miedo de no encontrar mi furgo negra.... o de comerme un zorro.
 70km/h de velocidad máxima a cara descubierta con siete bajo cero.
Son 19 bajo cero de sensación térmica.
Y sin periódico al pecho. 
Ale. 
Ahora tengo catarro. 
De vuelta, con la calefacción y las caleculos a tope, recojo a los gladiadores.
Bien gente, bien. 
Se os perdona el olor a tigre, y al de bálsamo de tigre también.
Todo suma, y la Korrika más. 
Egurreeee.





 

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