Silvia Vidal.
Silvia Vidal se convirtió hace pocos días en la primera persona del estado en ser premiada en los premios más prestigiosos del alpinismo, los Piolet d'Or. Recibió una mención especial por su carrera. Como era previsible, fueron solo un pequeño puñado de medios de comunicación en castellano los que se hicieron eco de semejante hito: El País, Confidencial Digital, Cope y La Voz Digital como medios generalistas, y Desnivel, Revista Inua y Mundo Deportivo como medios deportivos. Así, en un colectivo como el montañero, actualmente más pendiente de aparentar y de hacer seguimiento de quien mejor aparenta, ha llamado la atención la pequeña o nula repercusión que ha tenido lo logrado por Silvia. ¿Qué hubiera ocurrido si la premiada o el premiado hubiera sido alguno o alguna de las deportistas de montaña con más poder mediático y/o de dinero que hay en España? Un Txikon, un Soria, un Kilian, una Pasaban o una Troguet habrían sido sonadísim@s, aunque estos deportistas estén a años luz del alpinismo vanguardista que se nomina y premia en los Piolet d'Or, y que por razones de visibilidad y de dinero no se enseña.
También, llama la atención que en un mundo con recientes y justas reivindicaciones feministas como es el del deporte en la montaña, no se haya aprovechado un notición así para hacer causa, como sí ha ocurrido por ejemplo entre el gran público con el caso del Balón de Oro de Alexia Putellas, pero no se puede esperar más de un mundo de la montaña que visibiliza lo que visibiliza y que está ahora más pendiente de lo que se vende y se exhibe en medios y redes sociales, sea regular, malo o muy malo, que por apreciar al alpinismo de calidad. Alpinistas como Mikel Zabalza, Juan Vallejo, Ana Gracia, María Cardell, Oriol Baró y la propia Silvia merecen algo más que el habitual poco seguimiento del público, y en ocasiones de las marcas.
Silvia Vidal posee un curriculum espectacular por sus escaladas a muchas de las paredes más difíciles y salvajes de la Tierra. Perú, Chile, Pakistan, India, Alaska y otros han sido países testigos de sus espectaculares expediciones. La catalana ya fue Piolet de Oro estatal en 1996 por una escalada en el Picu Urriellu, y dos décadas más tarde nominada a los Piolet d'Or, los internacionales, los gordos, por otra escalada en Alaska... Sin embargo ella nunca ha interesado lo más mínimo entre el gran público, ni se usa como ejemplo de empoderamiento femenino entre el público de montaña pese a ser un máximo exponente de ello. La calidad, la humildad, la exposición y compromiso que toma Silvia, y su alpinismo respetuoso con la montaña no vende. ¿Le pasará como a Kei Taniguchi, la primera mujer de la historia en ganar el Piolet d'Or, que fue olvidada de ello cuando los medios dijeron más de una década después que el Piolet d'Or a Catherine Destivelle era el primero? Pues tiene pinta.
👏👏👏🙌
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo con lo dicho
ResponderEliminarLo apoyo al cien por cien
Buenas reflexiones ;-)
ResponderEliminarEnhorabuena! Silvia y toda la razón, depende de quien sea premiado será la repetcusion mediatica. Qué pena!
ResponderEliminarEres mi reina desde k te conosco en este mundo
ResponderEliminarSiempre sigo todo lo que hace, conosco mucha gente que sabe de la grandeza de Silvia y tambien creo k no es tan desconocida como parece
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