El Encapuchado del Área de Descanso de Legarda.

 

Quiero dejar claro que desconocía completamente que el Área de Descanso de Legarda fuera el lugar de encuentro que me encontré ayer por la noche. A ver, antes tenía costumbre de hacer uso del teléfono móvil mientras conducía, y de algún tiempo a esta parte he moderado el uso, o como me ocurrió ayer a las diez de la noche, he comenzado a echarme con la furgoneta a un lado para hacer uso del aparato estando parado. Ayer, entre Pamplona y Gares, me salí de la autovía tras los Túneles del Perdón hacia el Área de Legarda para contestar a varios watsapp y cerrar algunas cuestiones de agenda (daba la casualidad que mi pareja estaba con dos amigas en casa y quería estar tranquilo escribiendo los mensajes antes de llegar). Era noche fría, pero estrellada y muy bonita. El lugar, cerca del Caserío de Basongaiz, lo conforman dos rotondas y dos parkings en las faldas de la Sierra del Perdón, y aparqué en la parte alta del lugar. Durante 15 minutos estuve haciendo uso del teléfono móvil, también consultando redes sociales y hasta un parte meteorológico para el domingo, y me llamó mucho la atención lo frecuentado que estaba siendo el lugar. En el rato que estuve allí, casi una docena de coches llegaron y abandonaron el parking, aparcando muy pegados a mi furgoneta, con lo grande que es el parking (???). Como yo estaba a lo mío, tampoco le di mucha importancia al asunto, aunque me sorprendió el ajetreo, o que un tipo paseara sin ninguna luz por el parking fumando un cigarrito. De pronto, en una de las ventanillas de la furgoneta me sorprende la silueta de un encapuchado como el de la imagen que acompaña a este post, mirando hacia adentro, quieto y tenebroso. El susto es mayúsculo y le grito "¡¡¿Qué haces?!!" mientras con una mano activo el cierre centralizado del vehículo. El hombre parece que también se asusta, y monta rápido en su coche y lo mueve hasta la otra esquina del parking, donde hay otro coche también. Aquel arranca y tras cruzar el parking en subida, aparca paralelo a mi furgo ante mi atónita mirada. Entonces el conductor enciende las luces del interior de su coche para descubrirse, y le veo recostado en el asiento del conductor con la polla fuera y haciendo gestos lascivos de que vaya a hacerle una felación...

Nervioso, arranco la furgo ya con la idea en la cabeza de que me he debido meter como buen pardillo en un lugar de cruising, y salgo pitando del parking. Eso sí, tal es el sobresalto que me ha dado el tipo encapuchado en mitad de la oscuridad de la noche, que en vez de volver a tomar la autovía o la carretera vieja de Legarda, tomo la carretera a Muruzabal. Para más inri, al atravesar la variante de Obanos, atropello a un pobre tejón que no puedo evitarlo pese a volantazo.... En casa, mi pareja y sus amigas me dicen que estoy sobresaltado, pero al final acabamos tod@s riéndonos. 

En la web mispicaderos.com puntúan al Área de Descanso de Legarda con un 3.4 sobre 5 destacando que es un rincón íntimo y discreto cuando anochece. En gays-cruising.com describen a este área de cruising como lugar de afluencia alta e intimidad media, con horario de 24 horas. También hay comentarios en esta web para quedar en el sitio. En pamplonagay.blogspot.com explican que hay tres zonas en esta salida de Legarda (la 1 y 2 muy concurridas, y la 3 más intima).

Lo que tampoco sabía es que en los últimos tiempos ha habido varios atropellos mortales en los aledaños, y que algunos relacionan con estos encuentros de cruising... A saber. En marzo de 2020 moría un camionero ruso atropellado de noche en la misma autovía, y en julio del año pasado un pamplonica perecía casi en idénticas circunstancias en el mismo tramo de autovía, y también de noche....

El que se aburre en la vida es porque quiere.