Peña Roya en Sierra de Tendeñera.

octubre 23, 2022

Peña Roya en Sierra de Tendeñera.

Fuertes pendientes sobre el Ibón de los Asnos.

Peña Roya (2578m) llama la atención a todos los montañeros o esquiadores que bajan en coche por el Valle de Tena. Al final esta cumbre y la de su vecina Peñablanca (2557m), destacan 1600 metros de desnivel sobre el río Gállego y siempre tuve curiosidad por visitarlas. Hay que recordar que este macizo conforma el extremo occidental de la Sierra de Tendeñera. Lo que desconocía es que una GR pasara muy cerca de la cumbre por el paso de Portiello Chetro. En la red algunos dicen que se trata de una antigua GR, otros que es una variante de la GR11, y los hay que explican que es una derivación que une la GR11 con la GR15 (opción más plausible).

Mai y yo realizaremos una ascensión con tiempo dudoso desde la pista de la Hoz de Jaca. En una curva de herradura a izquierdas tomaremos el camino que asciende al Collado de Bozuelo por debajo de los paredones norte de Peñablanca y Peña Roya, y desde el collado ascenderemos paralelos a la Cresta Norte o Cresta de Arbex de Peña Roya, hasta el vallecito colgado entre el viejo conocido Sabocos (2757m) y Peña Roya. En este vallecito conectaremos con la GR misteriosa que de antigua, como dicen algunos, no tiene nada (pintura en perfecto estado). La GR nos lleva de manera espectacular a la base del cresterío cimero, el cual salva a derechas sin ninguna dificultad hasta Portiello Chetro. De frente, hay dos canales que parecen presentar bonitas alternativas y tomo el de la derecha trepando a gusto (I-II) hasta el portillo donde me espera Mai.

La loma cimera del Peña Roya y el Peñablanca nos recibirá con mucho viento y algo de lluvia, por lo que desecharemos ir a coronar Peñablanca y coronaremos Peña Roya, la más alta de las dos. En su cima hay una estación meteorológica. Lástima la inexistencia de vistas, que se compensarán con la apertura de claros en el descenso, con atmósfera limpia tras las bajas presiones, observando el otoño y la belleza de Tena. Los días regulintxis son tan encantadores que los de buen tiempo porque entre otras cosas se ven arcoirirs, olas de nubes, paisajes nítidos tras el paso de un frente, etc....