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Atardeceres en mitad de la nada. |
La Ruta Nacional 40 de Argentina es uno de los recorridos más increíbles de la Tierra para hacer en vehículo de motor, consta de 5300 kilómetros uniendo la frontera de
Bolivia con Cabo Vírgenes, y es en la
provincia patagónica de Santa Cruz donde hayamos el tramo más salvaje e inhóspito; los 700 kilómetros, en su mayoría sin asfaltar, entre
El Calafate y la pequeña
ciudad de Perito Moreno. En 2010 me pareció una buena idea unir
El Chaltén (al norte de El Calafate) con
Bariloche montando en la única línea de autobús que se interna en este territorio los meses estivales. Así, un autobús hace el recorrido El Calafate-Perito Moreno-El Calafate en dos días (700kilómetros x 2), y hay que estar atento al calendario para coger dicho autobús porque cada dos días pasa en dirección sur, y cada dos días en dirección norte...
Lógicamente los paisajes en esta parte del globo son espectaculares, aunque hay que lidiar con el turismo de masas. Desde El Calafate uno puede visitar el archifamosísimo
Glaciar Perito Moreno, aunque si lo que te gustan son los lugares tranquilos olvídate. La entrada al
Parque Nacional de los Glaciares es muy cara y la obligación es caminar por un pequeño circuito acondicionado cerquita de la lengua de hielo, a semejanza a mangas para ganado, con tablas de madera por todos los lados. Vamos, un circo. Disfruté más caminando por las afueras de El Calafate hasta la
Laguna Nimez y viendo la otra realidad de la Patagonia (pobreza y basura que arrastra el viento), que viendo esta catalogada maravilla del Mundo. El Chaltén es otro lugar famoso por historias y batallas de escaladores que vive cierto boom turístico que algunos locales aborrecen, echando de menos los años dorados donde el lugar casi solo era visitado por hippies y escaladores. En Buenos Aires más de un argentino ya me avisó; "es más auténtica la Región de Lagos que la Patagonia Turística." Por eso hacer la continuación de la Ruta 40 puede hacerte descubrir esas otras cosas que caracterizan a estos lugares, que son la soledad, los vastos espacios deshumanizados y la tertulia alrededor de un mate con los demás usuarios del colectivo, aunque todo se irá también al garete, porque cada año que pasa hay más kilómetros asfaltados. Al menos, en los meses invernales toda esta región es lo más parecido a un glaciar.
Lago Cordiel es una masa de agua en mitad de la nada y
Bajo Caracoles es un pueblo de 33 habitantes remoto y lejos de todo, como si estuviera en el Outback australiano. Al autobús le cuesta pasar de 30 kilómetros por hora en muchos de estos tramos y no es difícil charlar con el chófer de reserva, con algún que otro mochilero o con algún local que va a ver a un familiar en la otra punta del país. Al otro lado de la ventanilla y los montes del fondo, hacia el oeste de la provincia
se asienta uno de esos parques nacionales remotos, que solo visitan unos pocos cientos de personas al año, llamado "Perito Moreno" y que es lo más opuesto al otro Perito Moreno, el famoso. Y tras una jornada agotadora, al atardecer, el autobús aterriza en el tercer Perito Moreno del día; una ciudad de 4600 habitantes, final del peor tramo de la Ruta 40. Así, al día siguiente será otro cantar hasta Bariloche cruzando la
provincia de Chubut y entrando en la de Río Negro, límite septentrional de Patagonia. La ruta pasa por ciudades como Esquel y El Bolsón y hay largos tramos asfaltados. Nunca olvidaré la aridez y la soledad de los lugares entre El Chaltén y la frontera con Chubut.
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La Ruta 40 entre El Calafate y Bariloche.
Dos días de autobús. |
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Cielos patagónicos. |
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Flamencos en Laguna Nimez. |
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El Glaciar Perito Moreno. Un lugar tranquilo.... |
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Que quede constancia. |
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El Chaltén. |
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El Fitz Roy. |
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Lago Cardiel. |
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En un viaje tan largo y lento en autobús no pueden faltar las charlas. |
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Un pueblo en mitad de ninguna parte y dos mochileras con ganas de marchar al sur. |
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Estancia la Siberia. |
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