Volver a empezar.

Cresteando en Ezkaba Txiki.
 Correr por el monte es el deporte que más me gusta sin ningún género de dudas; una delicia para los sentidos; un ejercicio de concentración en las bajadas y un ejercicio aeróbico potente en las subidas en mitad de senderos preciosos y vistas bonitas. Tras varios meses de parón obligatorio, me he obligado a volver a trotar suavemente de manera regular, dicen que la carrera suave regenera, y además intercalar tramos de caminata con tramos de correr siempre ayuda. Poco a poco voy dándole la vuelta a la lesión que arrastro desde el 11 de Enero, que se dice pronto. La clave ha sido identificar el mal exactamente, que tenía su origen en la espalda, y el haber fortalecido estas últimas semanas las lumbares y los abdominales ha sido de gran ayuda. Me ha servido mucho encontrar y ojear la web "Uno que corre", de un aragonés llamado Pablo Franco que tiene dos protusiones lumbares, para decidir que salir ahí afuera a ser yo mismo era lo mejor que podía hacer.


            Lógicamente, no me encuentro como un corzo precisamente, pero disfruto como nunca. Alguna molestia hay, pero éstas han estado conmigo desde Enero, y haciendo otros deportes las molestias se han convertido en dolores. Me acuerdo de la Cueva de Espoz en Marzo, el Galibier en Julio, o Arthaburu hace un mes y pico, y compruebo que el progreso está siendo positivo, y ésto me motiva. ¿Quién me mandaría a mí estirar como un bruto en el otoño pasado después de correr? ¿Y estirar de esa manera los isquios? Un consejo; después de hacer un deporte exigente come, bebe y descansa, después, al rato, estira si quieres, y hazlo suave y sin curvar la espalda. Hoy troté por Ezkaba Txiki y Burutxeko, de nuevo me encontré con esas vistas y esos rincones de un pasado muy feliz, esperemos que regrese. Correr es salud por mucho que algunos se encabezonen en decir lo contrario. Aurrera!!


...

Cima de Burutxeko (618m)

7,44km y 260m+ en 51´

Comentarios

  1. Fletxa Coja de Donibane3 de septiembre de 2015, 23:08

    Perfecto, estás a tiempo de ir a Canfranc y aún te sobran dos días para barranquear. Parecerá una chorrada (sobre todo porque lo digo yo), pero siempre (NOTA DEL TRADUCTOR: en el texto original, "siempre" podría ser "de un tiempo a esta parte"; y "de un tiempo a esta parte" podría ser "anteayer, para entendernos"; luego no me vengáis llorando) he pensado que el cuerpo humano es una máquina perfecta (por ejemplo, para matar y componer baladas pop, valga la redundancia), pero que en realidad sin la mente (y algunos incluso CON ella) no somos nada. Lo que sigue lo he contado muchas veces y en muchos sitios (recuerdo cuando se lo relaté a los líderes del G8, qué atentos escuchaban; en realidad, estaban dormidos). Bueno, el caso es que hace unos años (no me extenderé en describir el contexto, tan sólo procede comentar que finalmente conseguí escapar de Vietnam y que esa primavera quedé entre los cinco últimos de Eurovisión, dos enormes motivos de orgullo), estaba impepinablemente lesionado. Me dolía, me molestaba, no podía con ello. Sentía las piernas, pero más de lo que me habría gustado. Mi carrera atlética estaba arruinada (más o menos igual que cuando comenzó, pero como una década después llevaba las piernas depiladas TODO PARECÍA MÁS PROFESIONAL E INJUSTO). Sin embargo, tras varios meses en el dique seco, y precisamente mientras paseaba por la cota baja de Ezkaba, ese camino paralelo a la ronda, me adelantó corriendo una pareja, me quedé mirándolos, me entró la envidia y me puse a pensar que igual empezaba a correr otra vez, a pesar de la pupa y de que al día siguiente tenía hora en la pelu. Por no enrollarme: decidí curarme. Bueno, esto suena demasiado a santo en potencia; digamos que decidí pasar de mis achaques. Obviarlos. Exorcizarlos (guau). Superarlos. Integrarlos en mi nuevo ser y eliminarlos por sudoración. No sé cómo lo hice, pero el caso es que me reenganché, poco a poco, y antes de poder darme cuenta (aunque era perfectamente consciente, por lo desgarrada que entraba la ropa en la lavadora) ya iba por ahí entrenando como un loco (con el machete en la boca y los tres ojos fuera de sus órbitas). Por si esto lo lee alguien de Arnedillo, añadiré que para la Ciencia continúo lesionado. Es decir, no me han operado, así que "imagino" que el problema sigue donde estaba, que existe y tal. La única diferencia es que no le hago caso, o que lo gestiono a mi manera, como gestionaré este glorioso país si me dais vuestro voto, queridos conciudad... Bueno, esto lo dejo para otro día. Terminaré con un consejo de abuelete. Yo antes estiraba. Estiraba mucho. Estiraba casi tanto como prevaricaba. No sé si era feliz, pero la gente me veía estirar, me veía prevaricar y pensaban: "Míralo, es feliz con sus estiramientos y sus prevaricaciones". Todo correcto, una persona intachable, un Terminator de la serie 4000, de los Rolling y no de los Beatles, bla, bla, bla... Bueno, pues si me preguntan ahora (ahora que soy más sabio y, sobre todo, ahora que lo de Itoiz ha prescrito), contestaré: no perdáis el tiempo estirando, ved capítulos pendientes de "Huevo Kínder" (así pronunció un amigo mío, en una gloriosa ocasión, "The Walking Dead"... VERÍDICO), haced la lista de la compra o qué sé yo. En lugar de estirar (aquí viene el consejo, lo digo por si me lee alguien de Arnedillo), salid a dar un paseo. Vuestro cuerpo se relajará y se estirará de manera natural. De esa manera los alienígenas abductores de músculos contracturados nunca irán a por vosotros.

    Mucho bien, San Christian. Enhorabuena por tu autocuración (aunque dice mi abuela que eso no es ni autocuración "ni pollas", que has hecho lo que cualquier español de bien debería: seguir las indicaciones de Franco... estás que lo tiras, no que lo estiras). Como premio/castigo, serás perseguido hasta el fin de tus días por un ejército de médicos enfurecidos, frustrados, blanquísimos. Posiblemente, en plan huevo Kínder.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Fletxa, eres un puto caso, siempre es un placer leerte, hazte un blog y desparrama tus ideas. No sé que más ponerte... Nos vemos!!

      Eliminar
  2. Aúpa Christian, veo que estás de nuevo en la arena, en la tierra y en las piedras, ¡¡corriendo!! Enhorabuena pero no te quejes demasiado porque a la vista de todas las aventuras que has contado aquí en los últimos meses tampoco es que te hayas aburrido mucho ¿no? Correr no has corrido, pero lo que es barrancos, pedales y montañas no te han faltado ¿eh? Pero te entiendo muy bien porque a mí también me gusta correr más que ninguna otra cosa y creo que es el ejercicio más "cañero", lo tengo comprobado cuando yo mismo lo he aparcado durante semanas y al volver me sentía sin aire en la caja ni fuerza en las patas por mucho que hubiera estado dando pedales o sudando en la máquina elíptica del gimnasio. ¡¡No hay nada como correr!! En cuanto a los estiramientos no sé, intuyo que nunca es bueno forzar. Yo lo que hago de cuando en cuando es pasarme el "rulo" por cuádriceps, gemelos e isquios en el gimnasio y "soltar" esas fibras musculares que imagino tensas y enredadas, con nudos y telarañas. Cuidado con Javier y sus invitaciones a Canfranc ¡¡ve poco a poco!! y el año que viene nos animamos los tres a las ultras de Aneto-Posets, Tena y Canfranc. ¡¡¡ ¿Hay o no hay Javier? !!!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Al Aneto no sé ("Un poco lejos, ¿no?", comenta nerviosilo mi agente de la condicional), pero es cierto que lo acontecido el fin de semana pasado en Tena me ha dado mucha envidia, y encima de la malsana. Cachis.

      Eliminar
    2. El rulo ese es el palo ese que te lo pasas por las patas??? jeje

      Eliminar
    3. Está el "palo" y está el "rulo", el rulo es un tubo hueco de superficie semiblanda y rugosa, dependiendo del modelo: http://www.decathlon.es/foam-roller-domyos-id_8344800.html

      En este enlace sale uno que venden ahora en el Decartón. En cuanto al Fletxa tienes razón, si se currara un blog sería la caña, jajaja!!!! Pero le veo muy antisistema yo a este campeón como para llevar un diario de forma ordenada y rigurosa...

      Eliminar
  3. Ánimo Christian!!!
    Lo importante es volver a empezar, y tu ya estás ahí!
    Nos vemos!
    Laura

    ResponderEliminar
  4. Gracias Laura. A seguir así campeona; pasión y entrega por la montaña en el ADN, como debe ser!!!!

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares